miércoles, 21 de octubre de 2015

LA RUTINA POLÍTICA

LA RUTINA POLÍTICA




  

Otra vez la demagogia y el incumplimiento


 Estos políticos que sufrimos no les importa estar en el candelero por corrupciones, no hacen nada por consensuar durante unos años un método político de transparencia a favor del pueblo y ,una y otra vez, caen en el mismo error.

Hace ya unosdías que asistimos , nuevamente, al espectáculo deprimente, de la campaña electoral. Ya se sabe que debe comenzar quince días antes de las elecciones pero es que ya ni se recatan y comienzan antes de la convocatoria oficial y aburren a las ovejas con tanta promesa que  saben que no van a cumplir.

Lo más extraño es que elpueblo sigue tragándose la bola que les dan estos impresentables.

El deterioro es tan grande que están accediendo a la gestión pública lo peor de cada casa ya se encargan de deshacer lo que con tanto esfuerzo ha costado a la mayoría.

Las minorías minoritarias se saltan las leyes como si con ellos no fuera nada o como si estuvieran en los bosques de los proscritos.

Los altos dirigentes de los partidos tradicionales del bipartidismo se enzarzan en declaraciones absurdas porque ven amenazado su reino de Taifas y los celos se desparraman como cataratas.

Los líderes emergentes sacan tanto pecho que algunos deben ir a la UCI.

Cualquier mequetrefe sin base ni preparación se arroga el derechos desalvador de todos.

España está en peligro porque una turba de desarrapados intelectuales desea tomar el poder y su caramelo para seguir esquilmando la patria.





¿ Ciudadanos domesticados?



 Mientras tanto seguimos llevando el botijo a los líderes mundiales como en fechas históricas pretéritas y preferimos ser la cola del león y no afrontar las reformas urgentes, necesarias e inteligentes que necesita España dejando a un lado las ambiciones y rencillas.

Eso es lo que debería prevalecer y dejarse de tanta mandanga troglodita.

Hacer un país moderno, ágil, culto, educado, tranquilo, con leyes racionales, con una justicia rápida y seria y unas instituciones que estén al servicio del ciudadano y no de los caciques amparados por el sistema.

El sistema está caduco y huele a podrido pero para eso está la razón, el buen juicio,los sentimientos y la inteligencia.

Claro que esmucho pedir a los cantamañanas que todos los días del año escuchamos o leemos con paridas del tamaño del Everest.

Aquiles, molesto y cabreado



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