RONALD GIBSON , médico de familia inglés, (1909-1989) dio una conferencia sobre conflictos generacionales y citó cuatro frases:
1ª " Nuestra juventud gusta del lujo y es ineducada; no hace caso a las autoridades y no tiene mayor respeto por los mayores de edad. No se ponen en pie cuando una persona anciana entra. Responden a sus padres y son simplemente malos".
2ª.-" Yo no tengo ninguna esperanza en el futuro de nuestro país si la juventud de hoy toma mañana el poder porque esta juventud porque esta juventud es insoportable, desenfrenada y simplemente horrible".
3ª,- " Nuestro mundo llegó a su punto crítico. Los hijos ya no escuchan a sus padres. El fin del mundo no puede estar lejos".
4ª.- " Esta juventud está malograda hasta el fondo del corazón. Los jóvenes jamás serán como la juventud de hoy no será capaz de mantener nuestra cultura".
Los asistentes mostraron su aprobación y el conferenciante reveló el origen de las frases:
La primera es de SÓCRATES ( 470-399 a.C)
La segunda de Hesíodo ( (720 a.C)
La tercera de un sacerdote 2.000 a.C)
La cuarta estaba escrita en un vaso de arcilla de las ruinas de Babilonia ( actual Bagdad) y con más de cuatro mil años de existencia.
Después hubo un silencio y dijo:
" Padres y madres de familia relájense pues siempre ha sido así"
Dio las gracias y se retiró.
Lo cierto es que la situación actual de "nuestro mundo" no induce al optimismo y creemos que nos encontramos en situación crítica ya que todo induce a pensar que el cambio generacional no está correctamente planteado y que hay pocas esperanzas de que se haga en la buena dirección.
Las señales son poco alentadoras.
Los ejemplos de aquellos que deberían efectuar el relevo no muestran demasiados indicios de cordura y adecuada eficacia.
Indudablemente estamos ante un cambio cultural y de formas en que nuestra civilización tal y como la concebimos va a sufrir transformaciones importantes pero lo que no vemos claro es que se hagan de forma pacífica y dialogante.
Asistimos en directo y a diario a muestras de desatinos constantes que no hace falta que enumeremos.
No obstante confiaremos en que el ser humano consiga como siempre superar los obstáculos para conseguir un sistema que nos permita a todos lo que nunca se ha conseguido: la convivencia pacífica universal y el progreso racional sin traumas especiales.
Príamo
No hay comentarios:
Publicar un comentario