EL PARTIDO CIUDADANOS

 Ciudadanos

Ciudadanos no es un partido cualquiera ni acaba de llegar a la escena política porque su trayectoria se conoce hace tiempo y que está alcanzando cotas importantes de resultados hacia los sufridos electores.

Desde nuestra perspectiva vamos a efectuar algunas consideraciones con el fin de ver las principales notas características que le definen, siempre desde la óptica de la persona normal.

Su atractivo se encuentra principalmente es su líder Albert Rivera que ha sabido transmitir un entusiasmo juvenil importante a mucha gente.

Representa la imagen de un cambio con ideas y propuestas, alejado del tufo de las dos cavernas y con un dominio de los medios fruo de su preparación personal, su dominio del debate y de unos objetivos claros a cumplir.

La expectación es máxima y la dificultad también consecuencia del origen del partido en una región española que sufre desde hace tiempo el ataque de unos políticos impresentables y de bajo nivel y una acrisolada desafección hacia la unidad española.

Precisamenmte por este motivo Albert Rivera y sus compañeros de partido están recibiendo un apoyo inusitado que responde a su honradez y claridad en las propuestas reformadoras de modernidad de toda la nación, a su defensa de la unidad; a su amor por España y a la sinceridad y valentía con que se afronta todo sin perderla compostura y dando una imagen que corresponde a lo que muchos consideramos que es el sitio que le corresponde a España.

Naturalmente que si sólo fuera su líder poco tiempo le auguraríamos al partido  en el panorama político español pero creemos que otra de las cualidades de su líder es rodearse de personas competentes que saben elaborar un proyecto con propuestas factibles y dando participación a todos, deshechando a las personas que sólo se introducen con el fin de alimentar su propio ego y beneficio personal.

Es la forma de ilusionar a equipos de personas que apoyen y ayuden a conseguir las metas.

Los resultados electorales serán importantes para el partido y para España.

Las expectativas son halagüeñas.

Esperemos que los españoles voten inteligentemente.

Ulises