DEMASIADA VIOLENCIA

Este mes de agosto está siendo demasiado pródigo en noticias relativas a la violencia hacia las mujeres y  los niños.


¿ Qué está pasando en nuestra sociedad española?

Ciertamente que en otros lugares del mundo suceden hechos y cada vez más frecuentes.

Sencillamente nadie se hace la pregunta poruqe los medios informativos sólo se quedan en lo superficial, en aquello que produce morbo, en las imágenes de los familiares llorando, en las indagaciones policiales, en las pesquisas judiciales, pero no se analiza con expertos de todo tipo la gangrena que lleva esta sociedad.

Indudablemente que lo que vamos a exponer es opinable pero trataremos de señalar algunos motivos que nos están llevando al caos.

1.- Ausencia de valores y comportamientos racionales por parte de las familias y los jónes que usan las diversiones y relaciones humanas de forma displicente y sin el debido cuidado y reserva.

2.- Dejadez de sus funciones por parte de los progenitores en el día a día con actitudes de trasladar la capacidad decisoria a los adolescentes y jóvenes. La autoridad paterna ha sufrido un deterioro que se proyecta sobre las instituciones.

3.- Mecanismos de corrección de consuctas obsoletas y permisivas que hacen papel mojado las leyes cuando convictos salen a las calles casi de inmediato.

4.- Normas cívicas totalmente olvidadas y permisividad ante las infracciones públicas y privadas en un baile de los malditos que nos está llevando a la ruina moral y social.

5.- Una conducta juvenil alocada y llena de peligros cuando se acude a aglomeraciones donde el alcohol, la droga y el ruido campan a sus anchas.

6.- Un uso alocado de las redes sociales ofreciendo pistas de la vida íntima y del comportamiento cotidiano que abre las puertas a los descerebrados.

7.- Unos medios de comunicación ávidos de noticias escabrosas y faltos de una sensibilidad crítica y respetuosa.

Así nos luce el pelo y así vamos hacia el precipicio a pesar de los actos de solidaridad, aplausos y declaraciones de alcaldes y vecinos.

Ulises.